Karma en la biblia

Karma en la biblia. Este post es hijo directo de un artículo previo de este blog. La palabra «karma» en la traducción del sánscrito significa «hecho».La ley del karma es la ley de los hechos: cosechas lo que siembras.“Todos serán condenados por sus obras, y por sus obras serán justificados” – todos conocen esta cita de las Escrituras. La ley de las obras, la ley de causa y efecto, se explica en la Biblia.

karma en la biblia
Karma en la biblia

La «Ley del Karma» fue inventada por sabios hindúes que intentaron explicar las razones del sufrimiento de la gente. Decidieron que la causa del sufrimiento era el castigo por hechos de vidas pasadas.

Asimismo, muchas personas creen en el destino o en el destino. Piensan que cada persona, desde la concepción hasta el último suspiro, vive según un guión escrito para él por Dios y Él incluso sabe de antemano el día de la muerte de todos. Esta es la creencia de muchos de los que se consideran cristianos.

Pero, ¿apoya la Palabra de Dios la enseñanza de que la vida de cada persona está gobernada por «la ley del karma» o por el destino?

Creados a semejanza de Dios, los seres humanos son capaces de reflejar sus cualidades como el amor, la justicia, la sabiduría y la fuerza. Dios también le dio a las personas libre albedrío o elección, y nosotros mismos podemos decidir si seguir la guía de Dios o no.

Estas palabras no tendrían sentido si Dios predeterminara la vida de cada persona de antemano.

¡Y cuán cruel e injusto sería que Dios preordenara nuestro destino incluso antes de que naciéramos, y luego exigir que seamos responsables de nuestras acciones! Dios no hace esto, porque él «es amor» y «todos sus caminos son justos» (es decir, justos). La Libertad y la predestinación (karmos o destino) son incompatibles.

Además, aprendemos de la Biblia que una persona puede influir en su futuro. 

El karma es un término acuñado por las religiones orientales; ellas consideran que la intención de nuestras acciones provocará consecuencias positivas o negativas, en esta o en alguna de nuestras siguientes vidas. Es decir, el efecto del karma puede que no sea inmediato, pero en cualquier momento seremos castigados o recompensados por nuestros méritos.

Pero desde el punto de vista de la Biblia, este concepto no es compatible con la fe cristiana por diversas razones. Padecer de calamidades a causa de nuestras malas acciones, es una de las teorías que no son aceptadas por la iglesia católica; todas las personas que muestren signos de arrepentimiento y fe hacia Dios, serán perdonados por sus pecados.

Por otro lado, el cristianismo no cree en una fuerza invisible que mantiene el orden de la existencia. Solo la voluntad de Dios hace posible el origen de las cosas, su cumplimiento y permanencia en este mundo. Por lo tanto, al creer en energías trascendentales como el karma y la ley de atracción, estaríamos dudando de la obra de Dios.

En cuanto a la reencarnación, el karma expone que todos entramos a un círculo infinito de vidas; la calidad de cada una dependerá de nuestro comportamiento en la anterior. Pero según Hebreos 9:27, el hombre muere una sola vez y luego será sometido a un juicio final. Es decir, la posibilidad de reencarnar es imposible según la Biblia; además, luego del juicio final no tendremos segundas oportunidades.

Ahora, al leer las Escrituras, puede prestar especial atención a todo lo relacionado con la ley de causa y efecto y tomar nota de ella como guía en su vida.

Si una persona tiene un 95% -100% de karma, esto significa que satisface completamente los deseos de su ego y no se preocupa en absoluto por otras personas o la situación que se desarrolla a su alrededor. Estas personas caminan sobre el filo de la navaja, porque pueden morir en la próxima catástrofe, accidente, epidemia, etc. 

Según las circunstancias de sus vidas, tendrán que ir al lugar donde mañana comenzará un tsunami, un terremoto, o el transporte en el que se moverán (aire, agua, tierra – sin diferencia) se romperá – así es como Se desarrollará la ley de causa y efecto generada por estas personas para su destino.

Si una persona tiene 0% de karma, esto significa que es santa, porque se deshizo y se quitó voluntariamente su ego, como un trapo apolillado y lo tiró. En una persona así no hay un solo defecto, solo dignidad. Hay pocos santos.

Una persona que se entrega a sus manifestaciones no divinas aumenta su carga de karma.

Conclusión Karma en la biblia

Creer en el karma es incompatible con la fe en un Dios personal, en el sacrificio expiatorio de Cristo, en su intercesión ante el Padre, en el perdón de los pecados. El concepto de karma es una parte integral de una cosmovisión, diametralmente opuesta a la cristiana, una cosmovisión, cuyos elementos no pueden reconciliarse con el teísmo bíblico. 

Para aceptar el concepto de karma, uno debe rechazar consistentemente todo lo que constituye la Buena Nueva, además, no importa cuán terrible suene, rechazar a Cristo como nuestro Redentor y Abogado, como Aquel que tiene el poder de perdonar los pecados. Y creer en Cristo significa rechazar la creencia en el karma.